La oposición se enfrenta al apoyo de Morena
El caso de Cuauhtémoc Blanco, diputado federal y exfutbolista, continúa generando controversia en el ámbito político. En esta ocasión, las acusaciones en su contra y las decisiones de la Cámara de Diputados han desatado una serie de reacciones, tanto de apoyo como de rechazo, dentro y fuera del Congreso.
La postura de Ricardo Monreal
Ricardo Monreal, coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, no tardó en calificar de «heroínas temporales» a las diputadas que votaron en contra de la solicitud de desafuero contra Cuauhtémoc Blanco. En su conferencia de prensa, Monreal defendió a las legisladoras de su partido, quienes, según él, estaban siendo atacadas injustamente por votar de acuerdo con lo que había sido un acuerdo dentro del grupo parlamentario de Morena. «No tenemos ningún reclamo», afirmó, refiriéndose a las diputadas que decidieron votar en forma diferenciada, a pesar de que previamente habían aprobado apoyar el desafuero.
A lo largo de su intervención, Monreal también expresó su solidaridad con las diputadas que votaron a favor del dictamen, quienes, según él, han sido objeto de una «guerra sucia». El coordinador de Morena destacó que este tipo de ataques no son justos, considerando que las legisladoras tomaron su decisión con base en un acuerdo grupal previo.
Cuauhtémoc Blanco se defiende
Por su parte, Cuauhtémoc Blanco negó las acusaciones que se han presentado en su contra, asegurando que son «infundadas» y basadas en un delito fabricado. El diputado se presentó en la Fiscalía de Morelos, donde sostuvo que las autoridades no han actuado correctamente al tratar su caso sin pruebas suficientes. Blanco insistió en que se trata de una estrategia de «desprestigio» y aseguró que se mantendrá en su puesto como legislador. Defendiendo la «transparencia» y el «estado de derecho».
Críticas del PAN y la falta de pruebas
Desde la oposición, las críticas no se hicieron esperar. El coordinador parlamentario del PAN, Elías Lixa, calificó la comparecencia de Blanco ante la Fiscalía de «farsa» y una «simulación». Según Lixa, lo que se está intentando es cambiar la narrativa del caso para «lavarse la cara» tras el respaldo de Morena al legislador acusado. Lixa subrayó que el procedimiento legal debería ser mucho más riguroso y que no se puede proceder sin que se analicen adecuadamente las pruebas.
Exigencia de una investigación adecuada
En un giro más, diputadas del PRI también se han pronunciado en favor de una «debida diligencia» por parte de la Fiscalía de Morelos. A través de un Punto de Acuerdo, exigieron que se integren correctamente las pruebas en el caso y que se garantice el acceso a la justicia para las víctimas. Sin que se lleven a cabo decisiones apresuradas o basadas en intereses políticos.
El futuro de Cuauhtémoc Blanco sigue siendo incierto, y la disputa sobre su desafuero parece que continuará siendo un tema clave en los próximos meses.