Un reo falleció por la enfermedad
En el Centro de Readaptación Social (Cereso) número 3 de Ciudad Juárez, Chihuahua, se ha declarado una alerta por la presencia de seis casos positivos y 12 sospechosos de tuberculosis entre los reos.
Además, una interna del Cereso Femenil número 2 también resultó infectada por la bacteria.
Las autoridades se encuentran en alerta porque la enfermedad ya cobró la vida de un reo, José Aldape Pérez, el pasado 10 de julio.
Se trata de un problema que preocupa a las autoridades por el aumento de contagios y el riesgo que implica para la salud de los más de 4 mil internos que se encuentran en ambos penales.
Seis reos y una interna dieron positivo a la bacteria
La tuberculosis es una enfermedad infecciosa que afecta principalmente a los pulmones y que puede ser mortal si no se trata adecuadamente.
Esta bacteria se transmite por el aire cuando una persona enferma tose, estornuda o habla. Por eso, los lugares con hacinamiento y poca ventilación son propicios para su propagación.
Con la alerta se aplicaron medidas sanitarias para evitar más contagios
Ante esta situación, se aplicó de inmediato un protocolo de sanidad en cada caso positivo y sospechoso, junto con una restricción sanitaria para evitar que se propaguen los contagios.
La Secretaría de Seguridad Pública Estatal y la Secretaría de Salud trabajaron en coordinación para atender a los afectados y realizar una investigación para detectar la forma del contagio.
Los reos infectados utilizan exclusivamente utensilios para comer, regaderas, sanitarios, a los que los demás reos no tienen acceso.
También se les sigue un protocolo clínico y administración de medicamentos. Los casos sospechosos están bajo monitoreo y no presentan síntomas de alarma.
No se cerrarán los centros penitenciarios a las visitas tras la alerta
A pesar de la alerta por tuberculosis, la autoridad estatal no cerrará los centros penitenciarios a las visitas y seguirá el acceso sin modificaciones. Sin embargo, se mantendrán en alerta para evitar más contagios y se realizarán revisiones permanentes en el resto de los penales del estado.
La tuberculosis es una enfermedad que se puede prevenir y curar si se detecta a tiempo y se sigue el tratamiento adecuado.
Por eso, es importante que las personas que tengan síntomas como tos persistente, fiebre, sudoración nocturna, pérdida de peso o apetito, acudan al médico y se realicen las pruebas necesarias.
La salud es un derecho humano fundamental y las personas privadas de la libertad también merecen recibir una atención médica oportuna y de calidad.
Esperamos que las autoridades logren controlar el brote de tuberculosis en los centros penitenciarios de Ciudad Juárez y que se garantice el bienestar de los internos y sus familias.